Las autoridades en Honduras expresaron estar perdiendo las esperanzas de poder rescatar con vida los ocho mineros que sobrevivieron el derrumbe de una mina de oro.
En una rueda de prensa, el director de la comisión de emergencia del país, Moisés Alvarado, dijo que sin oxígeno, agua o comida, sería muy difícil sobrevivir las 66 horas que los mineros han estado soterrados.
"Hay un fuerte, malo olor a muerte en la mina", expresó esperando un milagro.
Once mineros pudieron escapar el derrumbe del miércoles y otros tres fueron rescatados el viernes de la mina San Juan Arriba.
Miles de personas trabajan en la minería artesanal en la región. La mina de San Juan Arriba, unos 100 kilómetros al sur de Tegucigalpa, es una de las más explotadas informalmente.
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