Este domingo la activista Maria-Teresa "Tess" Asplund, de 42 años, se paró sola frente a varios cientos de manifestantes neo-nazis en Suecia y elevó su mano en señal de protesta.
El acto desafiante de Asplund sólo duró un par de segundos, justo lo necesario para que el fotógrafo sueco David Lagerlöf capturara la imagen.
La foto de Lagerlöf, que publicó en Twitter, le ha dado la vuelta el mundo y miles han apoyado a la mujer que los ha inspirado a mostrar valentía frente al odio.
"Cuando lo hice estaba furiosa. No tenía miedo", le dijo Asplund a CNN.
"Ahora cuando pienso en eso, entiendo que pudo haber sido peor. Ahora lo veo".
La marcha en Borlänge fue organizada por el Movimiento de Resistencia Nórdica, un partido político que se opone a la inmigración a Suecia de personas que no sean blancos. Los manifestantes caminaban por una calle cuando Asplund les salió al paso con su puño en alto y caminó dándoles la cara por unos minutos antes de que la policía la apartara.
"Estaba en peligro", dijo Lagerlöf. "No tenía nada para pararse frente a ellos, eran demasiados, más grandes, suelen usar la violencia, y ella sólo se paró frente a ellos y los miró a los ojos, y eso pudo haber terminado muy mal".
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