Dos agentes de policía fallecieron este viernes y otro resultó herido en el norte de California en varios tiroteos efectuados por un hombre de origen hispano, identificado como Marcelo Márquez, que fue capturado después de casi seis horas de fuga en las que también tiroteó a un civil.
Márquez fue detenido poco antes de las 16:00 hora californiana en una vivienda de Auburn, en el condado de Placer, según confirmaron las autoridades, que pusieron así fin a un operativo que involucró a efectivos locales y federales, informó la agencia Efe.
"Esta persona cometió hoy una oleada de crímenes. No tiene idea del daño que hizo", dijo la portavoz de la oficina del alguacil en el condado Placer, Dena Erwin.
Debido a cuatro ataques a tiros distintos que perpetró Márquez, diversas agencias, con apoyo de perros adiestrados, helicópteros y vehículos armados emprendieron la búsqueda masiva del agresor, indica The Associated Press.
Los residentes de las cercanías recibieron la indicación de permanecer dentro de sus casas y las escuelas fueron cerradas durante la búsqueda. El propietario de la casa dijo que agentes utilizaron gas lacrimógeno para sacar al sospechoso del sótano.
"Creo que hay personas que dirían 'sabe, ojalá lo hubieran matado''', dijo el alguacil del condado Placer, Ed Bonner, en conferencia de prensa durante la noche. "No somos así. No somos él. Cumplimos nuestro trabajo", apuntó.
La jornada se saldó con la muerte de un ayudante del alguacil del condado de Sacramento y otro del condado de Placer, ambos por los disparos realizados por Márquez, según la versión policial, quien abrió fuego sin razón aparente contra los agentes cuando se aproximaron a su vehículo.
Los compañeros de ambos oficiales sí salvaron la vida y pudieron responder con sus armas de fuego al ataque, aunque uno de ellos, en el condado de Placer, resultó herido en un brazo.
Erwin dijo tras el arresto que Márquez había sido atendido, aunque desconocía el tipo de lesiones que sufría.
En una rueda de prensa anterior, el alguacil del condado de Sacramento, Scott Jones, anunció la muerte de su ayudante, el oficial Danny Oliver, de 47 años, quien primero se topó con el criminal poco antes de las 10:30 de la mañana, en el entorno de un establecimiento de la cadena Motel 6 en las afueras de Sacramento.
Oliver detectó algo sospechoso en un vehículo y se acercó, momento en el que el conductor, un hombre hispano que más tarde fue identificado como Márquez, disparó a bocajarro contra el agente que falleció de un tiro en la frente.
El oficial que iba con Oliver respondió al tiroteo, pero el individuo escapó acompañado de una mujer.
En su fuga, dejó otro herido de bala, un conductor al que disparó cuando trataba de robar su vehículo y posteriormente se apropió de una camioneta Ford F150 con la que cruzó al condado vecino de Placer, donde fue enfrentado por los otros dos agentes.
En Placer, las autoridades capturaron a la mujer que iba con el fugado.
La web de la CBS detalló que uno de los incidentes tuvo lugar cerca de Arden Way y Howe Avenue, luego de que fuera reportada la presencia de un sospechoso alrededor de las 10:30 horas locales.
Uno de los agentes asesinados fue identificado como el detective de homicidios de la oficina del alguacil, Michael David Davis Jr. El detective, de 42 años, murió 26 años después de que falleciera su padre, de quien recibió el nombre, en cumplimiento del deber como alguacil adjunto del condado Riverside en el sur de California.
La muerte de los agentes constituyó el número más alto de ellos caídos en un solo día entre la policía de California desde febrero de 2013. En incidentes separados ese mes, el expolicía de Los Angeles, Christopher Dorner, mató a tiros a dos agentes y a dos detectives de Santa Cruz.
El alguacil del condado Sacramento, Scott Jones, dijo que la cadena de sucesos mortales comenzó cuando el agente Danny Oliver, de 47 años, se acercó a un vehículo sospechoso en el que había personas en el estacionamiento de un motel, alrededor de las 10:30 de la mañana. Oliver recibió un disparo en la frente a corta distancia.
Oliver, el primer agente del condado caído desde 2008, tenía 15 años de servicio.
"No pudo contestar el fuego ni hacer nada", declaró Jones. El compañero de Oliver logró responder al fuego al tiempo que el vehículo huía del lugar.
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