"Resulta obvia en la declaración del Presidente, la intención de acallar cualquier reclamación nuestra por estos hechos de sangre" como la muerte el lunes pasado a manos de las fuerzas del orden del rebelde José David Suárez, alias "Gilberto Becerro", sostuvo el grupo armado en un comunicado publicado en su cuenta de Twitter bajo el título "Una dudosa generosidad".
El martes, Santos anunció que, dados los avances en el proceso de negociación que su gobierno adelanta con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, FARC, en La Habana, había dado la orden a las Fuerzas Armadas de no bombardear por 30 días los campamentos rebeldes.
Tras protestar por el hecho de que las autoridades hubieran presentado a alias "Gilberto Becerro" como un delincuente que se dedicaba al narcotráfico, la organización armada consideró que la advertencia de Santos, en el sentido de que habrá bombardeos cuando la población civil esté amenazada, es "una condición caprichosa" toda vez que esa calificación de riesgo estará en manos de las Fuerzas Armadas y del gobierno mismo.
El comunicado agregó que con la advertencia oficial de excluir al Ejército de Liberación Nacional de la orden de no bombardeo queda abierta la posibilidad "de hacerlo contra nosotros" porque "actuamos como organizaciones hermanas".
En síntesis, para las FARC la "generosidad (del gobierno) no es por tanto creíble".
Desde fines de 2012, la administración de Santos y las FARC adelantan en Cuba un proceso de paz para tratar de poner fin a más de 50 años de confrontaciones entre las partes.
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